De Barcelona al sur de Francia

El mes pasado me trasladé de domicilio. Decidí mudarme de la gran ciudad porque necesito un poco de relajación y tranquilidad en mi vida diaria. Por eso decidí llevar a cabo la mudanza en Barcelona. Dejo la ciudad Condal  y me voy a vivir a un pequeño pueblo en el sur del país francés. Soy de origen uruguayo, pero llevo más de catorce años asentada en España. Los tres primeros en las islas canarias y los últimos once en Barcelona. Pero esta ciudad ya me ha agotado por completo. Por eso, tras haber solicitado varios presupuestos mudanzas Barcelona, contacté con la que consideré que era la mejor para poderme mudar al pueblo que a partir de ahora será mi hogar. Esta empresa de mudanzas en Barcelona no era la más barata, pero a veces merece la pena invertir un poco de dinero para ganar un buen servicio. Tampoco tenía muchos bártulos que trasladar. Básicamente los muebles que he ido  adquiriendo y cuidando en mi piso en todos estos años y mis objetos personales.  Mis objetos personales se reducen a mi ropa, a todos mis libros y mis materiales de pintura. A éstos también  he de añadirle mis discos vinilo los cuales llevo coleccionando desde hace más de veinte años. Ya llevo dos semanas instalada con tranquilidad en el que a partir de ahora es mi nuevo hogar.  La empresa de mudanzas en Barcelona tardó solamente dos días en hacer todo lo que fue el traslado. Ellos mismos acomodaron los muebles a mi antojo tal y como yo les pedí y la verdad estoy muy contenta con el resultado de la ubicación. La mudanza en Barcelona fue todo un éxito. El piso que dejé ha quedado en perfectas condiciones sin ningún altercado en el trabajo de transacción. Y he de comentar que con respecto a los presupuestos mudanzas Barcelona, no hay que dejarse llevar por los más bajos. Lo bueno cuesta.